El cambio de los hábitos comerciales de los consumidores, empujado por el avance de las nuevas tecnologías, ha obligado al sector retail a diseñar un nuevo paradigma de consumo acentuando la atención en la experiencia de compra del cliente más que en el propio producto.
La rápida digitalización del consumidor, con el dominio de las redes sociales y la posibilidad de conectarse en cualquier momento mediante su Smartphone o tablet, ha conseguido que el sector haya emprendido profundos cambios parecidos al del código de barras de la década de los sesenta que transformó totalmente la manera de gestionar los stocks de las tiendas.
Ahora, por primera vez, es el consumidor y no el comerciante el que marca la pauta en la transacción comercial. Este fenómeno se ha dado hace no más de cinco años y ahora, por primera vez, el cliente tiene una tecnología más desarrollada que el empresario. Según un estudio de Indra, el 38% de la población pertenece a los denominados “nativos digitales”, es decir personas nacidas a partir de 1980 y que ya han crecido dentro de la sociedad digital. Este porcentaje se incrementará al 56% en 20 años y al 75% en 40 años, según las previsiones.
El consumidor actual está muy bien informado y demanda experiencias cada vez más gratificantes a la hora de comprar. Un ejemplo es el sector del automóvil. Antes, el comprador visitaba una media de cinco concesionarios hasta que encontraba el vehículo que quería, sin embargo ahora solo visita dos porque sabe perfectamente lo que quiere.
El sector retail cada vez cuenta con más herramientas para conocer mejor a sus clientes de tienda física y también a los que compran online. Sin embargo el cliente no diferencia cuando compra en tienda física o en la red y los retailers tienen que adaptarse con rapidez a sus comportamientos para seguir siendo competitivos y aumentar su rentabilidad.
El futuro del sector retail pasa no solo por mejorar la experiencia de compra de los clientes, sino también por mejorar los tiempos y la eficiencia a la hora de servir sus productos o servicios. El usuario quiere inmediatez y un buen servicio cuando compra online, por tanto la nueva demanda requiere una solución precisa y eficaz y la pelota en este aspecto está en el tejado del sector retail para responder cuanto antes con todas las garantías.
Su mayor reto será la digitalización y la innovación de las tiendas físicas. Para ello, la cartelería digital está creciendo constantemente debido a su capacidad de conectar con el cliente, mejorar la comunicación y permitir un espacio de promoción moderno y atractivo.
Según un estudio realizado por IAB Spain (Asociación de la publicidad, marketing y comunicación digital en España), el 88% de los encuestados valoran de manera muy positiva la publicidad digital debido a la actualización de sus ofertas y su creatividad a la hora de ofrecerlas.
El 90% de los encuestados opina que esta publicidad transmite modernidad e innovación, valores que ayudan a construir una imagen más moderna de la marca. En la encuesta, el 71% aseguraba que la cartelería digital ayuda a recordar mejor el producto, un aspecto importante en un momento como el actual donde recibimos cientos de impactos publicitarios al día.
Según el estudio, el 43% de los usuarios valora muy positivamente en una tienda física visualizar un catálogo interactivo o realizar la compra online mediante pantallas táctiles en la propia tienda.
Por tanto, está muy claro que la digitalización de los puntos de venta, comienza a ser una necesidad urgente para crear tiendas inteligentes que fomenten la interacción de los usuarios. En Retail 360 ayudamos a muchas empresas en el proceso de digitalización de sus recursos para adaptarse a las nuevas tendencias. No dude en contactar con nosotros para cualquier duda o consulta.
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