No todo el mundo sabe la diferencia que hay entre CPG y retail. La mayoría sí sabe lo que es el retail, pero no el CPG. La principal diferencia es que las empresas CPG fabrican, comercializan y venden todo tipo de productos a las empresas retail y éstas, se encargan de vender esos productos a los clientes finales en sus tiendas.
En este post vamos a ver la importancia de estos dos tipos de empresa, la relación entre ellos y sus principales semejanzas y diferencias.
CPG son las siglas en inglés Consumer Packaged Goods (Bienes de Consumo Empaquetados) y tiene que ver con las empresas encargadas de fabricar, distribuir y comerciar con bienes físicos empaquetados que luego son vendidos a través de una tienda minorista.
El término CPG involucra a las empresas que se sitúan por encima de la cadena de suministro y del desarrollo, producción y venta de los productos destinados al consumo del usuario final. Por tanto, el CPG está relacionado con los mayoristas, es decir las empresas que fabrican los productos que después el consumidor podrá encontrar en las tiendas de los retailers.
También hay que decir que muchas empresas de CPG se dedican a vender sus propios productos. Por ejemplo, hay grandes marcas de moda que, aunque se clasifican como CPG porque son los creadores y distribuidores de sus productos a minoristas, también disponen de tiendas propias que solo venden productos de su marca.
El desarrollo tecnológico de las últimas décadas ha generado muchos cambios en las empresas CPG, de tal forma que sus productos también se venden en el sector del comercio electrónico.
En la actualidad, los clientes suelen utilizar la fórmula “Click & Collection”, es decir, que ordenan la compra online pero luego recogen el producto en la tienda física. Antes, el usuario recibe un mensaje en su teléfono móvil que le informa de que ya puede recoger su producto en el lugar elegido. De esta forma, las CPG pueden dar un paso más allá en la cadena de suministros generando una interacción más estrecha con el consumidor final.
Las líneas de negocio del CPG y retail suelen cruzarse a menudo, ya que tienen ciertas similitudes. Como hemos visto, una empresa CPG puede convertirse en un retailer al vender directamente al consumidor final sus propios productos, pero también puede suceder que un retailer se convierta en una empresa CPG. Por ejemplo, grandes empresas de EE.UU como Amazon o Walmart fabrican, comercializan y venden productos de sus propias marcas.
A simple vista parece que no hay diferencias entre CPG y retail, ya que uno puede convertirse en el otro y viceversa, pero no podemos referirnos a ambos indistintamente y no se deben confundir los términos.
La principal diferencia entre CPG y retail se sitúa en el destinatario del producto. Las tiendas retail compran a los fabricantes sus productos y después los venden a sus consumidores finales aplicando distintas estrategias de venta propias del sector retail.
Tanto el CPG como el retail pueden utilizar las funciones del otro, pero vamos a centrarnos en sus principales diferencias:
Es la diferencia más importante a priori, aunque luego puede minimizarse, pero en principio, el CPG tiene un público específico (Long Tail) que opera en el sector mayorista y el sector retail opera a nivel minorista, vendiendo directamente al consumidor final.
Tanto en el CPG como en el sector retail, la logística es muy importante para optimizar sus procesos. El sector retail desarrolla estrategias para mejorar sus ventas al público y el objetivo de las empresas CPG es optimizar la productividad y mejorar los KPIs con el objetivo de satisfacer la demanda de los distintos nichos de mercado.
El sector retail hace mayor hincapié en la inversión y gestión de los inventarios para reducir los costes de almacenamiento, mientras que el CPG tiene mayor rotación de productos y su reto es distribuir toda la producción de manera más rápida según la demanda del mercado.
En el retail se utiliza la mano de obra humana en la mayor parte de sus procesos, sin embargo, en el CPG se utilizan procesos automatizados en la producción de sus productos, aunque es cierto que solo en las empresas más grandes. En la mayoría de empresas de los dos sectores todavía trabajan empleados.
El principal objetivo de los retailers es crear una experiencia de compra satisfactoria en el consumidor final mediante una atención personalizada y con uso de las últimas tecnologías para sorprender al cliente. En el CPG el objetivo es generar mejores procesos para optimizar la velocidad en la producción y la distribución en las tiendas minoristas.
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