La tecnología llega al sector del retail, ésta pretende mejorar la experiencia del usuario, el control del stock, y un sin fin de ventajas destinadas a mejorar la eficiencia y la productividad.

Algunos de los ejemplos más innovadores los podemos encontrar en  los supermercados.

Ofertas al móvil: En función al historial de compra, geolocalización, preferencias señaladas por el propio usuario,… los usuarios reciben ofertas personalizadas directamente a su dispositivo móvil, por lo que se me mejora la experiencia de usuario con ofertas a las que será receptivo, pudiendo aumentar el establecimiento la venta cruzada y la fidelización del cliente.

Recientemente comentamos  Zara y su aplicación de nuevas tecnologías como el RFID permitía  el control del stock, y es que es uno de los pilares de todo retail. El RFID  (Radio Frequency IDentification, en español identificación por radiofrecuencia ) permite controlar cuando un producto ha sido removido de las góndolas, y ayuda a controlar cuándo un producto ya no se encuentra en su posición, principalmente, porque ha sido el elegido por un cliente.

Pero la tecnología RFID tiene más beneficios, como la combinación de esta tecnología en internet, la identificación y localización de los artículos en la cadena de suministro, disminución de la pérdida desconocida, prevención de robos, …

Cámaras de seguimiento: La introducción de cámaras digitales de seguimiento pueden conocer mejor a un consumidor concreto, ya que permiten comprobar el trayecto completo de un consumidor en el establecimiento. Esto permite conocer cómo reacciona un consumidor ante ciertos productos, su proceso de elección, qué promociones le han captado su atención,…

El vidrio jugará un papel importante en la introducción de nuevas tecnologías destinadas a facilitar la venta. La introducción de probadores con cristales que ganarán opacidad cuando un cliente entre en ellos, espejos de 360 grados, o la posibilidad de que el cliente se pruebe una prenda y vea  cómo le quedarían los diferentes colores disponibles. Son sólo unos ejemplos de las tecnologías que nos esperan, aunque muchas de ellas están en fases de prueba a la espera de estudiar su funcionamiento de y su aceptación por parte de los usuarios.